Con adversidades económicas y pocos recursos Jawa siempre es presente en competición presentando constantes prototipos de sus ingenieros técnicos, como un revolucionario proyecto de 125cc con válvula rotativa, realizando la admisión a través de la pared lateral del cilindro, montando un carburador de doble cuerpo. La mayoría de sus proyectos fueron descartados en la producción por sus altos costes pero si aprovechados por su competencia.
A partir de 1978 concretamente en los ISDT de Suecia, los pilotos checos pueden competir en mejores condiciones, ya que el fabricante, presenta importantes novedades en sus motos todo terreno, principalmente gracias a la introducción de componentes de una nueva y emergente industria auxiliar, con mejoras en chasis, horquillas Marzocchi, amortiguadores Sachs de última generación, nuevas carrocerías de componentes plásticos, mandos, manetas, puños, llantas, montando los nuevos neumáticos checos Barum todo esto da una nueva estética sencilla, atractiva y compacta, que cuida hasta el último detalle.
Con esta situación una vez más Jawa pasa a ser la principal protagonista entre las varias categorías que forman los ISDT.
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